Los pintxos (Skewers in San Sebastián / Donosti)
Hablar de San Sebastian es hablar de la mejor gastronomía vasca, distinguida por la riqueza de sus sabores, la amplitud de sus formas y la calidad de sus ingredientes, sumamente variados, desde carnes, pescados y mariscos hasta las mejores hortalizas. No es de extrañar que Euskadi sea la región que atesore más estrellas michelín de la península ibérica. Como no podía ser de otra manera, es aquí donde encontramos un verdadero tesoro gastronómico, el pintxo. Toda una tradición pesa sobre estos pequeños bocados, a veces auténticas obras maestras en miniatura, que no te puedes perder.
La aparente sencillez del pintxo reviste todo un arte culinario. En líneas generales, el pintxo consiste en una rebana de pan, sobre la que se sitúa una ración de comida. Aunque no es indispensable, una palillo suele atravesar la ración para otorgar solidez al conjunto; de ahí su nombre. Sin embargo, el nervio gastronómico y el ingenio de los nuevos artistas han convertido este aperitivo en todo un arte. Tanto es así que podemos encontrar una amplísima oferta de pintxos, desde los más conocidos como el Brick de gambas y puerros, el pintxo de anchoas, de jamón o el pintxos patatero, hasta los pinchos más originales de txipirón, champiñones, tacos de queso, alitas de pollo y hasta mini hamburguesas de roquefort, siempre a la caza de ese sabor definitivo. Y es que en este apartado hay para todos los gustos. Calientes o fríos, dulces o salados, tradicionales o innovadores, simples o complejos, el pintxo en Donostia no conoce límites.
Pero si hay un pintxo superior, un pintxo que destaque por encima del resto, ese es La Gilda. Para muchos el primer pintxo de la historia, esta leyenda culinaria se compone de aceitunas, guindillas y anchoas, pudiendo variar su proporción. Debe su nombre al mítico film de los años cuarenta de nombre homónimo, pues al igual que la actriz norteamericana, este pintxo es un poco picante.
También la crisis económica ha golpeado duramente al sector hostelero, que en su afán de promover el consumo y ofrecer platos más asequibles ha desarrollado una iniciativa que ya es toda una revolución en Donostia, el pintxo pote. Esta combinación de pintxo y pote se sirve en días concretos y solo durante unas horas al día, permaneciendo activa todo el año. Los clientes pueden elegir cualquier pote o bebida (crianza, sidra, caña, etc.), siendo su precio de lo más económico. Tremendamente popular, el pintxo pote cuenta incluso con una aplicación móvil, la Pintxo Pote App, que brinda a los usuarios información útil acerca de los lugares, rutas y horarios en que se encuentra disponible este manjar. Ya no tienes excusa para disfrutar de la mejor gastronomía del mundo al mejor precio.
Una buena forma de conocer San Sebastián es ir de pintxos. Infinidad de rutas y establecimientos se dispersan a lo largo de la capital guipuzcoana. Una de las más seductoras es la ruta de la Parte Vieja, empezando en el bar A Fuego Negro, pasando por el acogedor Ganbara y terminando en Tamboril, un lugar ideal para degustar los mejores pintxos. El barrio de Gros, de Egia o la plaza Easo también ofrecen una exquisita variedad de estas delicias, sin lugar a dudas un espectáculo para el paladar.
Photos related to Los pintxosLa aparente sencillez del pintxo reviste todo un arte culinario. En líneas generales, el pintxo consiste en una rebana de pan, sobre la que se sitúa una ración de comida. Aunque no es indispensable, una palillo suele atravesar la ración para otorgar solidez al conjunto; de ahí su nombre. Sin embargo, el nervio gastronómico y el ingenio de los nuevos artistas han convertido este aperitivo en todo un arte. Tanto es así que podemos encontrar una amplísima oferta de pintxos, desde los más conocidos como el Brick de gambas y puerros, el pintxo de anchoas, de jamón o el pintxos patatero, hasta los pinchos más originales de txipirón, champiñones, tacos de queso, alitas de pollo y hasta mini hamburguesas de roquefort, siempre a la caza de ese sabor definitivo. Y es que en este apartado hay para todos los gustos. Calientes o fríos, dulces o salados, tradicionales o innovadores, simples o complejos, el pintxo en Donostia no conoce límites.
Pero si hay un pintxo superior, un pintxo que destaque por encima del resto, ese es La Gilda. Para muchos el primer pintxo de la historia, esta leyenda culinaria se compone de aceitunas, guindillas y anchoas, pudiendo variar su proporción. Debe su nombre al mítico film de los años cuarenta de nombre homónimo, pues al igual que la actriz norteamericana, este pintxo es un poco picante.
También la crisis económica ha golpeado duramente al sector hostelero, que en su afán de promover el consumo y ofrecer platos más asequibles ha desarrollado una iniciativa que ya es toda una revolución en Donostia, el pintxo pote. Esta combinación de pintxo y pote se sirve en días concretos y solo durante unas horas al día, permaneciendo activa todo el año. Los clientes pueden elegir cualquier pote o bebida (crianza, sidra, caña, etc.), siendo su precio de lo más económico. Tremendamente popular, el pintxo pote cuenta incluso con una aplicación móvil, la Pintxo Pote App, que brinda a los usuarios información útil acerca de los lugares, rutas y horarios en que se encuentra disponible este manjar. Ya no tienes excusa para disfrutar de la mejor gastronomía del mundo al mejor precio.
Una buena forma de conocer San Sebastián es ir de pintxos. Infinidad de rutas y establecimientos se dispersan a lo largo de la capital guipuzcoana. Una de las más seductoras es la ruta de la Parte Vieja, empezando en el bar A Fuego Negro, pasando por el acogedor Ganbara y terminando en Tamboril, un lugar ideal para degustar los mejores pintxos. El barrio de Gros, de Egia o la plaza Easo también ofrecen una exquisita variedad de estas delicias, sin lugar a dudas un espectáculo para el paladar.
Pintxo de Risotto
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Brocheta de gambas y bacon (Pintxo)
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Pintxopote (Risotto)
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Pincho clásico. La gilda
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