Fiestas de Semana Grande (Fiestas en San Sebastián / Donosti)
Porque San Sebastián es una tierra de tradiciones, las fiestas de la Semana Grande encarnan admirablemente el espÃritu de una ciudad orgullosa de sus raÃces. De sábado a sábado y durante la semana del 15 de agosto, la capital guipuzcoana se viste de fiesta para celebrar uno de sus eventos más queridos, un espectáculo sensacional que anualmente cautiva a propios y extraños. Recoge un amplio abanico de actividades para todos los gustos, desde el Concurso Internacional de Fuegos Artificiales hasta la entrañable comparsa de Gigantes y Cabezudos en un acontecimiento memorable que no te puedes perder.
Durante la ceremonia de apertura que tiene lugar en los jardines de Alderdi Eder, una agrupación vocal, acompañada de orquesta, entona el popular «Artillero dale fuego» que precede a uno de los momentos más emblemáticos de la Semana Grande, el Cañonazo. Desde finales del siglo XX, este cañón napoleónico, recuperado en 1945 en la bahÃa de La Concha, viene protagonizando el inicio de las fiestas con un espectacular cañonazo; el encargado de prender la mecha es el Artillero Mayor, que prende la mecha desde la terraza del ayuntamiento en un acto verdaderamente emotivo.
Durante siete dÃas, un centenar de actividades se reparten a lo largo y ancho de San Sebastián. Teatro, danza, música, cenas, deportes, talleres y mucho más en una semana inolvidable donde tampoco faltan espectáculos pirotécnicos. El Concurso Internacional de Fuegos Artificiales es uno de los grandes alicientes en el que participan compañÃas procedentes de todo el mundo. Multitud de conciertos se reparten de distintos puntos de la urbe, acogiendo no solo las mejores voces de Euskadi sino también del panorama internacional. Una oferta variada para una festividad variado, que destaca también por sus Gigantes y Cabezudos. Esta comparsa histórica comenzó su andadura hacia 1982 y se compone de ocho gigantes y trece cabezudos de más de cuatro metros de altura, siendo una de las grandes señas de identidad de la fiesta.
Tenemos que remontarnos al verano de 1875 para descubrir los orÃgenes de la Semana Grande. Tras el incendio de la plaza de toros de San MartÃn, José Arana Elorza, un empresario considerado el padre del evento tal como lo conocemos, levantarÃa una segunda plaza de toros en Atocha y complementarÃa los festejos taurinos con actuaciones musicales y espectáculos pirotécnicos. Cuando, casi cien años después, se abandonaron las corridas de toros, lejos de resentirse, la Semana Grande recobró el viejo espÃritu de la iniciativa y se renovaron contenidos con una mejor estética y una calidad a la altura de la ciudad más cosmopolita de Europa y una de las más encantadoras del litoral cantábrico.
Y es que la Semana Grande no es solo una de las fiestas más importantes de San Sebastián, sino que también es emoción, es cultura, es única, y merece la pena descubrirla.
Durante la ceremonia de apertura que tiene lugar en los jardines de Alderdi Eder, una agrupación vocal, acompañada de orquesta, entona el popular «Artillero dale fuego» que precede a uno de los momentos más emblemáticos de la Semana Grande, el Cañonazo. Desde finales del siglo XX, este cañón napoleónico, recuperado en 1945 en la bahÃa de La Concha, viene protagonizando el inicio de las fiestas con un espectacular cañonazo; el encargado de prender la mecha es el Artillero Mayor, que prende la mecha desde la terraza del ayuntamiento en un acto verdaderamente emotivo.
Durante siete dÃas, un centenar de actividades se reparten a lo largo y ancho de San Sebastián. Teatro, danza, música, cenas, deportes, talleres y mucho más en una semana inolvidable donde tampoco faltan espectáculos pirotécnicos. El Concurso Internacional de Fuegos Artificiales es uno de los grandes alicientes en el que participan compañÃas procedentes de todo el mundo. Multitud de conciertos se reparten de distintos puntos de la urbe, acogiendo no solo las mejores voces de Euskadi sino también del panorama internacional. Una oferta variada para una festividad variado, que destaca también por sus Gigantes y Cabezudos. Esta comparsa histórica comenzó su andadura hacia 1982 y se compone de ocho gigantes y trece cabezudos de más de cuatro metros de altura, siendo una de las grandes señas de identidad de la fiesta.
Tenemos que remontarnos al verano de 1875 para descubrir los orÃgenes de la Semana Grande. Tras el incendio de la plaza de toros de San MartÃn, José Arana Elorza, un empresario considerado el padre del evento tal como lo conocemos, levantarÃa una segunda plaza de toros en Atocha y complementarÃa los festejos taurinos con actuaciones musicales y espectáculos pirotécnicos. Cuando, casi cien años después, se abandonaron las corridas de toros, lejos de resentirse, la Semana Grande recobró el viejo espÃritu de la iniciativa y se renovaron contenidos con una mejor estética y una calidad a la altura de la ciudad más cosmopolita de Europa y una de las más encantadoras del litoral cantábrico.
Y es que la Semana Grande no es solo una de las fiestas más importantes de San Sebastián, sino que también es emoción, es cultura, es única, y merece la pena descubrirla.
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